Este tratado internacional de 1992 tiene tres objetivos principales: la conservación de la diversidad biológica, la utilización sostenible de la diversidad biológica y la participación justa y equitativa de los beneficios que se deriven de la utilización de recursos genéticos.
El CDB cubre todos los aspectos directa o indirectamente relacionados con la diversidad biológica y es considerado el instrumento principal para el desarrollo sostenible.
En el 2002, junto con la Declaración de Cancún se creó el Grupo de Países Megadiversos como un esfuerzo más para promover la preservación y el uso sustentable de la diversidad biológica.
México ocupa el quinto lugar en este grupo de países megadiversos. Se estima que nuestro país alberga alrededor de 200 mil especies distintas lo que equivale al 12% de la diversidad que existe en el planeta.
En el 2010, los estados firmantes de la Convención de Diversidad Biológica , incluido México, establecieron el Plan Estratégico para la Diversidad Biológica, mejor conocido como las Metas de Aichi, que debería cumplirse para el año 2020.Este marco global de acción de diez años buscó proteger la biodiversidad y mejorar los beneficios que esta nos brinda alineándose a la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
Los 5 objetivos estratégicos son:
– Mitigar las causas por las cuales se está perdiendo la biodiversidad desde los ámbitos sociales y políticos.
-Reducir las presiones que enfrenta y promover la utilización sostenible de los recursos naturales.
-Mejorar la situación de la biodiversidad a través del cuidado de sus ecosistemas.
-Optimizar los beneficios que la naturaleza nos brinda (aire limpio, agua dulce, alimentos)
-Aumentar el conocimiento que las personas tienen sobre esta.